domingo, 27 de junio de 2010

17 MINUTOS DE INCONSCIENTE

20:05 PM - Este es un buen momento para escribir..

Esa pregunta apareció en su mente tan repentina como cae una gota de lluvia en la calle, miró el techo del lugar y sintió un fuerte escalofrío que removió su alma. La pregunta flotaba entre los aires como un espejismo... ¿Que podía hacer con el dolor que tenia dentro? Se le cruzaron dos respuestas que le parecieron lógicas en un primer momento. Una de las opciones era comenzar a reír, comenzar a usar ese escape para el dolor que, después de todo, siempre le había funcionado. Siempre que había reído había logrado opacar aquel sentimiento funesto que la invadía de vez en cuando. Siempre que había reído había logrado engañar a todo aquel que osara hurgar en su interior. La gente siempre la veía como una mujer feliz y con un futuro prometedor. Mas esa
no era la percepción que tenia de ella. Ella se consideraba un alma muy frágil que se escondía debajo de mil y un caparazones tan fáciles de romper como su alma misma. Ella se pensaba muy insegura y, era cierto, una suicida empedernida. Una suicida cobarde que nunca había podido cumplir su misión. Pero que mas da, ella había logrado sobrevivir de una manera, por ratos no tan desagradables, muy buena. Pero el punto era que no sabia si reír o no. En el momento en que lo pensó, no se sentía de humor para hacerlo. Solo miró al vacío para ver si este le podía responder. No lo hizo. Como había dicho, ella siempre había optado por reír y parecer la mujer feliz, mas en este caso estaba en un nivel en el cual reír no le servía de nada y más bien se convertía en un suplicio. Así que.. ¿Qué hacer?
La otra opción era llorar... y no le faltaban ganas. Cuando esa respuesta apareció en su mente sus ojos se empañaron al instante y amenazaban sus lagrimales con soltar aquel liquido representante de dolor. Bajó la mirada. Y se cubrió el rostro fingiendo cansancio. ¿Qué podía hacer? De pronto le daban ganas de abandonarse en lo que sentía y estallar en llanto a pesar de que todos se enteraran... ese era el problema. Si lloraba la gente sentiría compasión por ella y preguntarían mil y un veces si es que estaba bien. Y eso.. a ella le molestaba mucho. Ella no quería sentir la cercanía de nadie en esos momentos y mucho menos si esa cercanía revelaba cierta pena por su persona. Es decir, estaba entre abandonarse en sus sentimientos para poder dejar ir todo lo que la comía o callarse el llanto por el temor a que la gente la incomode con su constante pregunta... ¿Que hacer?

20:22 PM- Este es un buen momento para pensar....